jueves, 28 de julio de 2011

EL NIDO DEL TIGRE (TAKTSHANG GOEMBA)


J.J.D.R.
Cuenta la leyenda que el Gurú Padmasanbhava allá por el año 747, voló en su forma tántrica de Dorje Trollo-una de las diez que poseía- a lomos de su consorte Yeshe Tsogyal, a quíen había transformado previamente en tigre volador para el viaje, y lo llevó hasta posarse sobre un acantilado en el que pasó tres meses meditando en una cueva.

TAKTSHANG GOEMBA

Reconocido como segundo Buda, gurú Rimpoche, también llamado en Buthán y el Tibet “Maestro precioso”, tras meditar durante noventa días, decidió alzar un templo en aquella cueva que, hoy día, es el lugar más sagrado del templo de Taktshang Goemba.

GURÚ RIMPOCHE -MAESTRO PRECIOSO

A novecientos metros del suelo, el monasterio de Buthán (país de los Himalayas), se asoma al abismo levitando sobre la niebla persistente del valle Paro al noreste de la India.
El monasterio de Taktshang Goemba, conocido como el “nido del águila”, fue construido en el año 1692 y, hoy día, es un icono religioso y turístico para los intereses del reino de Buthán.

NIDO DEL TIGRE

A tres mil ciento veinte metros de altura sobre el nivel del mar, y novecientos metros del suelo del valle, la edificación de un templo de culto a dicha altura no debió de ser tarea fácil.
Una popular leyenda del siglo VIII cobra protagonismo en el episodio de la construcción del monasterio. La historia narra la aportación que los obreros recibieron de las Dakinis, (diosas femeninas con capacidad para volar), quienes se encargaron del transporte de los materiales necesarios hasta la cima de la montaña, solucionando con su ayuda la tarea más ardua de la construcción del templo.

REPRESENTACIÓN DE UNA DAKINI

El monasterio, prohibido para los turistas, sufrió un grave incendio en el año 1998 en el que falleció un monje, y muchas esculturas de gran valor junto con antiquísimas pinturas ardieron bajo las llamas.


Hoy en día, restaurado el monasterio, sigue mostrándose bello y altivo bajo la penumbra de un cielo plomizo y propenso a ventiscas y monzones.
La tierra del dragón de fuego, como se conoce al reino de Bhután, es un pequeño país aislado del mundo y rodeado de gigantes montañosos de más de siete mil metros de altura. El budismo está presente en cada tramo de sus valles y lugares, dónde los butaneses tejen con vivos colores sus rincones de culto y meditación.


A pesar de su aislamiento, estadísticamente, el reino de Bhután ocupa el noveno puesto en el ranking de países con un índice más elevado de felicidad.
Como suele decirse, “no es más feliz el que más tiene, sino el que menos necesita”.
¿Qué más se puede necesitar, cuando uno vive rodeado de tanta belleza, paz y serenidad?


Mientras se camina o se sube a lomo de mula -única manera de llegar al nido del águila- por el sendero adosado a la pared vertical de la montaña, el sonido del agua, el aire que rasga las piedras y las pisadas del caminante, son los únicos sonidos que se perciben en el valle de Paro.


En la tierra del dragón de truenos, los antiguos moradores de las montañas de Bhután, edificaron una muestra perfecta de unión entre hombre y entorno, regalándonos la oportunidad de disfrutar de un paraje de extrema belleza y recuerdo imborrable.

 Aportes y Datos:
http://es.wikipedia.org/wiki/But%C3%A1n
http://en.wikipedia.org/wiki/Paro_Taktsang


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6 comentarios:

maria jose dijo...

Vaya cosa mas bonita e increíble. Aunque el hombre sea el artífice de tantas cosas horrorosas, también tuvo tiempo de hacer estas preciosidades.

Capitán Capicúa dijo...

Aun hay personas, a las cuales hacer reverencias, esta clase de “humanos” son los que de verdad representan la vida y la prosperidad, un gesto precioso el de hacer un templo, llenarlo de seguidores y rezar a sus dioses… En pocas palabras, un templo muy “discreto”, en un lugar, de difícil acceso… Sin palabras amigo, estas cosas levantan las ganas de viajar y visitar el mundo…
Saludos de Capi.

Jorge Donato dijo...

Así es Marisa; el ser humano tiene esa extraña e ilógica capacidad de crear lo más bello y destruirlo en un segundo.
Gracias por tus comentarios y saludos.

Jorge Donato dijo...

Hola Capitán,
Hay tantos lugares en el mundo que conocer, y tanta gente que vive realmente en armonía con su entorno, que uno siente sana envidia cuando descubre lugares tan maravillosos.
Gracias amigo, saludos.

MA dijo...

Hermoso lugar el que muestran tus imágenes y pleno de paz y recogimiento con un texto magnifico texto documentando el post.

Gracias mil Jorge por tu huella amiga en mi blog, tu blog amigo.

Un abrazo de MA para ti.

Jorge Donato dijo...

Me alegra que te haya gustado MA.
Un saludo y gracias ti.

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