martes, 19 de junio de 2012

SENTINELESES


J.J.D.R.
El mar amaneció vestido de castigo el domingo 26 de diciembre del año 2004.
Devastador y mortífero, las entrañas del océano Índico se elevaron tras un terremoto cuyo epicentro fue la costa oeste de la isla de Sumatra, y un gigantesco tsunami, tras nacer y hacerse mayor en segundos, devoró la vida de más de 275.000 personas desolando cada palmo de tierra que encontró a su paso.

TSUNAMI INDONESIA 2004

El terremoto de Indonesia fue de grado 9,1 en la escala de Richter, el segundo de mayor envergadura registrado desde que se utiliza el sismógrafo.
La mayoría de las múltiples islas del océano Índico desaparecieron tras la gran ola dejando un reguero de muerte y caos.
Las islas Andaman, al este de la India en el golfo de Bengala, sufrió igualmente los efectos del seísmo. Una isla en particular, Sentinel del norte, de la cual se sabía habitada por una tribu nunca contactada, focalizó la atención de los grupos proteccionistas al pensar que tras el tsunami no había sobrevivido ninguno de sus miembros.

ISLA DE SENTINEL DEL NORTE

Una mañana, cuando un helicóptero guardacostas de la India rastreaba la isla buscando indicios de algún superviviente, se quedaron sorprendidos al ver como, desde la verde y tupida vegetación, varios individuos aparecían corriendo y lanzándoles flechas y alguna lanza.
Las imágenes grabadas por los tripulantes del helicóptero dieron la vuelta al mundo. Los Sentineleses seguían vivos, o al menos habían sobrevivido alguno de sus miembros tras el terrible terremoto y aquella noticia se convirtió en todo un gran acontecimiento.

LA FOTO QUE DIO LA VUELTA AL MUNDO

¿Quiénes son esos hombres desnudos y armados que en pleno siglo XXI descargaban con furia sus flechas contra el frío metal de un helicóptero?
¿Es cierto qué, durante siglos y siglos, a pesar de saber que estaban en aquella isla, ésta tribu ha logrado permanecer incorrupta ante el poder succionador del progreso?
Quise saber algo más de los Sentineleses, y aquí os relato lo poco que se sabe sobre ellos.
Pertenecen al denominado grupo de los negritos compuesto por los Granandamaneses, los Onje y los Jarawa, y se estima llevan en la isla alrededor de 60.000 años. Su idioma es el Sentineles y son cazadores recolectores. No se han evidenciado signos de utilización de fuego ni tampoco conocimientos o trabajos de agricultura, siendo la pesca, la caza de lagartos como el monitor, la recolección de miel, bayas, raíces,  así como frutas y plantas salvajes, lo que compone el sustento que mantiene y nutre a la comunidad de la isla.

MIEMBROS DE LA TRIBU SENTINEL EN LA PLAYA

La superficie de Sentinel del norte es de 72 kilómetros cuadrados de longitud por 8 de ancho. Una profunda y espesa jungla cubre la isla. Entre la espesa maleza los Sentineleses permanecen ocultos saliendo de vez en cuando para llenar sus despensas de peces y moluscos en la playa.
La isla está rodeada por una impenetrable barrera coralina que, según historiadores y expedicionarios, sirvió para frenar intentos de contacto –al no poder desembarcar en la playa- y frenar las enormes y peligrosas mareas del océano. Su lengua, cultos y religión son desconocidos, así como el número actual de nativos que habitan la isla, que se cree no supere el medio centenar.
Los Sentineleses no desean ser contactados. Innumerables intentos del gobierno indio -al que pertenece la isla- han sido infructuosos, y en la mayoría de los casos han tenido que salir atropelladamente de la isla perseguidos por las flechas que los nativos les terminan lanzando. En el año 2006, dos pescadores que faenaban cogiendo cangrejos cerca de la playa, terminaron asesinados por los nativos.

EN MUCHAS OCASIONES SE MUESTRAN VIOLENTOS Y AGRESIVOS 

El aislamiento de los Sentineleses es histórico. Los ingleses, que arribaron a las costas de todas las islas del archipiélago, fueron incapaces de hacerlo en Sentinel del norte. La gran barrera coralina y la feroz resistencia que encontraron por parte de sus habitantes hizo que sopesasen las consecuencias y utilizaron la retirada como mejor argumento.
Muchas expediciones han llegado hasta las playas con la intención de acercar posiciones y tomar contacto con los Sentineleses pero nunca se ha logrado llegar a desembarcar con éxito, y todo a quedado en acercamiento visual y entrega de algún presente.

BARRERA DE CORAL QUE PROTEGE LA ISLA

La tribu Sentinel ha dejado claro que no quiere saber nada del mundo exterior. Desean seguir ocultos tras el manto vegetal que les cubre de las miradas molestas de los cansinos expedicionarios. No desean saber nada de nosotros, y creo que es un deber, incluso una obligación, no inmiscuirnos en su mundo y dejarles seguir viviendo como ellos han elegido.

FOTO SURVIVAL.ES

Sentinel del norte se pierde en las brumas marinas del océano Índico. La irregular silueta del istmo Andamanés esconde el secreto perpetuo de una de las únicas y más enigmáticas tribus del mundo. Una etnia desconocida y misteriosa que mira al extraño que se acerca a sus costas con el miedo de aquel que quiere proteger su mundo del peligro más voraz y pernicioso.
Ése miedo les ha protegido durante milenios frente a nuestro mundo. Entiendo como lo más correcto, respetar y proteger su ecosistema y su pueblo de cualquier contacto mientras ellos no deseen tenerlo.

Aportes y datos:
Survivalinternacional.org
http://www.survivalinternational.org/material/355
Survival.es
http://www.survival.es/indigenas/jarawa/los_sentineleses
Celtiberia.net
http://www.celtiberia.net/articulo.asp?id=2120
Wikipedia
http://es.wikipedia.org/wiki/Centineleses


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Survival y National Geographic






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12 comentarios:

orthos62 dijo...

jeej los tienen bien puesto estos isleños Eh?
La verdad es que despues de una tragedia como aquella, que alguien haya quedado vivo allí es como un milagro.
Haber si tienen suerte y se les deja vivir tranquilos y con sus costumbres ancestrales.
un abrazo amigo

Karras dijo...

Como tu bien dices Querido jorge !es una obligación dejarles en paz¡. No se a que es debido esta aficción que tenemos por corromperlo todo. Ellos han hablado claro de que incluso están dispuesto a sacrificarse por conservar su forma de vida. ¿tanto nos cuesta entenderlo?. ¿porque tenemos que destripar todos los misterios?. Desde aqui espero y deseo que tengan toda la suerte del mundo, Y te doy las gracias por hacernoslos conocer. Un abrazo.

genessis dijo...

Hola Jorge
Una entrada muy interesante. Había leído ligeramente algo sobre esta tribu pero tú nos has proporcionado más detalles y vídeos que ilustran mejor la isla, la vida y la forma de ser de estos grupos que aún desean salvaguardar la esencia de su ser.
Tienen derecho a seguir siendo como son, si han sobrevido y se han multiplicado es porque tienen todas las posibilidades.

Gracias por compatir.
Un abrazo

Lola dijo...

Hola Jorge, impresionante las fotos de tu entrada de hoy ¡¡¡ qué miedo!!! Si me da solo mirarlas. Como cada vez lo que públicas me encanta. Un abrazo.

fus dijo...

Solo espero que los dejen tranquilos y no los contaminen. Una entrada genial Jorge. Enhorabuena

un abrazo

fus

Jorge Donato dijo...

Hola Orthos,
Así es, se les conoce como una tribu muy agresiva y violenta. Aunque no es para menos. En el siglo XVIII, cuando los ingleses llegaron a la isla, se llevaron por la fuerza a varios nativos que terminaron muriendo por las enfermedades que les fueron contagiadas y seguramente también de pena. En cuanto a que se hayan salvado del desastre de 2004, según leí y me pareció una reflexión interesante, es posible que se percatasen de la retirada brusca y masiva del mar antes del tsunami y se refugiasen en algún lugar seguro dentro de la isla. El conocimiento del mar y de las condiciones climáticas, después de tantos años aislados será su mejor defensa.
Gracias amigo por caminar por este sendero.
Un abrazo.

Jorge Donato dijo...

Amigo Karras,
Nos guste o no, forma parte de la condición humana el rasgar sobre todo aquello que desconocemos. Opino que esto nos ha llevado a descubrir grandes cosas y ser mejores. Pero creo que hoy día, cuando el mundo se puede explorar y conservar sin llegar a interceder en él, cuando hay gente que desea seguir viviendo en su mundo y rodeado de sus ancestrales costumbres como bien comentas y estoy totalmente de acuerdo, hay que dejarlos en paz y tratar por todos los medios de preservar su mundo. Lo esencial es no tomar contacto con ellos, pues lo primero que les puede pasar es que automáticamente se les contagie y mueran sin remisión. Reconozco que me apasiona saber que están ahí, disfrutando de la vida y el planeta en su burbuja temporal y aséptica de progreso, y a la vez deseo que sigan viviendo como ellos desean sin que nadie les moleste.
Un abrazo amigo.

Jorge Donato dijo...

Hola Genessis,
Totalmente de acuerdo contigo.
Han de seguir con su percepción cultural y sus concepto de grupo sin que nadie interfiera en ellos.
Sólo sería válido, pienso yo, cuando ellos mismos quisieran contactar con el mundo. Y aún así, correrían un grave peligro de desaparecer.
Un abrazo y gracias por caminar por este sendero.

Jorge Donato dijo...

Hola Fus,
Estoy contigo, espero que los dejen tranquilos. Después de 60.000 años viviendo allí a su manera, ¿Quiénes somos para perturbar su mundo? no crees?
Un abrazo amigo.

Jorge Donato dijo...

Hola Lola,
Gracias por caminar por este sendero, que en esta ocasión transitó por los bosques sentineleses, donde el hombre "civilizado" aún no ha conseguido plantar sus ideas.
Un abrazo.

LOBEZNA dijo...

Hola Jorge. Esta entrada me ha dado bastante repelus. Después del terremoto que sufrí el año pasado, esto me ha traído malos recuerdos. Eso no quita que sea una entrada muy bien hecha. Un abrazo.

Lembranza dijo...

Que les dejen en paz, es lo que ellos quieren. Como si el mundo modernos les fuera aportar cosas buenas, seguro que no tienen estrés.
Me ha gustado mucho tu reportaje Jorge. Gracias por seguir enseñándonos estos pedacitos, de aire fresco que todavía podemos encontrar en la Madre Tierra.
Un abrazo